El
presidente estadounidense critica la “creciente represión” de la sociedad civil
SILVIA
AYUSO Nueva York 24 SEP 2014 – EL PAÍS MADRID
Obama
habla durante un evento de la
Iniciativa 'Global Clinton' este martes. / S. P./POOL (EFE)
De no
haber sido por los hombres y mujeres “comunes y corrientes” que en su momento
trabajaron para abolir la esclavitud en Estados Unidos y más tarde a favor de
los derechos civiles, el país no tendría hoy un presidente negro. Quien lo
recordó fue el propio Barack Obama este martes en Nueva York, en un acto sobre
la importancia de la sociedad civil celebrado en los márgenes de la Asamblea General
de Naciones Unidas en el que acusó a países como Rusia o Venezuela de estar
“vilipendiando” y reprimiendo cada vez más a un colectivo “esencial” para el
buen funcionamiento de una democracia.
MÁS INFORMACIÓN
La
represión de las protestas en Venezuela genera fisuras en el seno del chavismo
China
intensifica la represión contra activistas y disidentes del régimen
Obama
pide al presidente de Vietnam que respete los derechos humanos
EE UU
recorta la ayuda militar a Egipto por la represión tras el golpe
El
régimen ucranio intensifica la represión en el día más sangriento
Un Obama
desbordado por las crisis globales busca apoyos en la ONU
“Es
precisamente porque los ciudadanos y la sociedad civil pueden ser tan poderosos
que cada vez más gobiernos están haciendo todo lo que pueden para
silenciarlos”, afirmó Obama en un foro de la Clinton Global
Initiative en el que calificó el apoyo de su país a estos grupos como una
“cuestión de seguridad nacional”.
“Desde
Rusia a China o Venezuela, se ve una represión implacable, se denigra el
disenso legítimo como algo subversivo”, denunció el presidente estadounidense,
que también señaló la creciente “intimidación pública” de la sociedad civil en
Hungría o Egipto.
En su discurso,
Obama rindió homenaje a los activistas que han pagado con sus vidas su defensa
de una sociedad civil más fuerte y abierta en países como Rusia, Libia o
Camerún. Y también hizo un fuerte llamamiento a la liberación de otros
activistas encarcelados como el líder opositor venezolano. “Nos solidarizamos
con los que están detenidos en estos mismos momentos. En Venezuela, Leopoldo
López, en Burundi, Pierre-Claver Mbonimpa, En Egipto Ahmed Maher, en China, Liu
Xiabo y ahora Ilham Tohti, en Vietnam el padre Ly. Y tantos otros”, enumeró
Obama.
Todos
ellos “merecen ser libres. Deberían ser puestos en libertad”, sostuvo el
mandatario, cuyo gobierno, pese a haber criticado en reiteradas ocasiones la
situación de las libertades en Venezuela, se ha negado hasta ahora a ceder a
las fuertes presiones del Congreso para que imponga sanciones duras a los
dirigentes del país sudamericano, limitándose hasta la fecha a revocar o
denegar visados a un “grupo” de altos funcionarios venezolanos.
Obama
coincide estos días en Nueva York con el presidente venezolano, Nicolás Maduro,
quien el miércoles pronunciará su primer discurso como mandatario ante la Asamblea General
de la ONU. Unas
palabras que su par estadounidense probablemente se perderá, puesto que a esas
horas Obama estará presidiendo una reunión sobre combatientes extranjeros en el
Consejo de Seguridad —al que Venezuela espera entrar el año próximo— y, más
tarde, atenderá la asamblea anual de la Alianza de los Gobiernos Abiertos con el mexicano
Enrique Peña Nieto.